Soy muy sincero, nunca pensé que Sony lanzaría una consola por 799€, especialmente cuando hablamos de una versión sin reproductor Blu-Ray.
Al fin y al cabo, el sentido común dice que se trata de un precio arriesgado para las ambiciones de la empresa, que podría traducirse en una repetición de lo que ocurrió con la PlayStation 3 hace unos años.
Sin embargo, desde 2006 (PS3) hasta ahora, muchas cosas han cambiado y, como tal, es posible que Sony esté probando el terreno para comprender qué debe hacer a continuación. La próxima consola del gigante japonés podría convertirse en un auténtico monstruo y, por ello, es necesario entender si existe demanda de un producto “caro” como este.
¡800 € por la PS5 Pro podrían ser una prueba para el futuro!
Por tanto, en un mundo donde nadie parece tener problemas para adquirir un smartphone con un precio de 1.500€. El mismo mundo en el que un PC gaming tampoco es nada barato… ¡Quizás haya margen para aumentar los precios, ofreciendo al mismo tiempo más rendimiento, nuevas funciones, entre muchas cosas más!
Es decir, esta Sony PlayStation 5 Pro no tiene como objetivo principal vender muchas unidades buenas en el mercado global. La idea es simplemente entender si hay espacio para ir más allá.
La idea es definir el plan para lo que viene después, es decir, el PS6!
Al fin y al cabo, como podrás imaginar, a pesar del lanzamiento de la PS5 Pro en 2024, la realidad es que la PlayStation 6 ya lleva varios años en desarrollo. De hecho, lo más probable es que los esfuerzos comenzaran poco después del lanzamiento de la versión original de PS5.
Dicho todo esto, parece que el objetivo de Sony es ofrecer una consola capaz de hacer lo que la actual PlayStation 5 no pudo hacer. Jugabilidad en 4K y 60 Hz, sin interrupciones, sin contratiempos, es decir, sin concesiones.
Básicamente, el objetivo es entender si es posible cambiar las reglas del mundo de los videojuegos, con capacidades visuales y de procesamiento nunca antes vistas en el mercado. ¡Pero esto es caro! De hecho, con el aumento de los costes de producción, resulta muy caro.
¿Hay espacio para una PlayStation 6 extremadamente potente, pero que cueste 999 €? Ésta es la pregunta que Sony quiere que se responda.
El problema es… ¡Esto va en contra de todo lo que debería ser una consola!
Como dije anteriormente, el objetivo es intentar cambiar las reglas. Esto se debe a que una consola no puede llegar al mercado con un precio como este.
Hasta ahora, una consola siempre ha tenido como objetivo ofrecer una buena experiencia de usuario, en un formato compacto, capaz de quedar bien en cualquier estancia de la casa, a un precio atractivo para llegar a las masas.
De hecho, durante muchos años, a lo largo de varias generaciones, los grandes nombres del mundo de los videojuegos (entre los que podemos incluir a Sony), fueron perdiendo dinero en cada consola vendida, para aumentar significativamente las ventas y, por tanto, como consecuencia directa. Además, el dinero lo obtendremos más adelante, en el software vendido para estas mismas consolas.
Si el paradigma cambia, será muy difícil convencer a los consumidores. ¡Solo espera y verás! Mientras tanto, comparte tu opinión con nosotros en el cuadro de comentarios a continuación.