Puede dar un poco de miedo al principio cuando detectas el olor a huevos podridos en tu coche. Especialmente cuando no estás seguro del origen. Si no tienes nada dañado en tu baúl, ni dejaste restos de comida en el auto, solo podría ser un problema de los componentes. Pero, ¿a qué se debe este olor tan desagradable en tu coche?
¿A qué se debe el olor a huevos podridos en tu coche?
En la práctica, todo puede surgir de un único componente.
Los convertidores catalíticos son contenedores metálicos que se encuentran en el sistema de escape entre el silenciador y el motor. En el interior, hay un elemento en forma de panal que se utiliza para convertir gases peligrosos, como el monóxido de carbono y el óxido de nitrógeno, en sustancias menos nocivas para los gases de escape. Sin embargo, el olor a huevos podridos a menudo se asocia con el sulfuro de hidrógeno. Su aroma en el coche es probablemente el resultado de un mal funcionamiento del convertidor catalítico, que libera sulfuro de hidrógeno en lugar de transformarlo normalmente en dióxido de azufre inodoro. Y no sólo huele mal, sino que además no es bueno respirar.
Por qué el convertidor catalítico no funciona correctamente
Aunque es probable que el olor aparezca más hacia la parte trasera del coche, cerca del tubo de escape, puede infiltrarse fácilmente en cualquier lugar. Dado que el sulfuro de hidrógeno puede ser peligroso, lo mejor es abrir las ventanas y acudir a un mecánico lo antes posible. Idealmente, la mayoría de los convertidores catalíticos deberían durar toda la vida útil del automóvil (especialmente cuando se limpian), pero varios problemas pequeños, a veces indicativos de un problema mayor con el motor, pueden provocar un mal funcionamiento del convertidor.
Esto puede incluir que el motor dañe el convertidor al enviarle gas crudo. O una fuga de aceite o refrigerante que se quema en los cilindros y fluye hacia el convertidor. Por supuesto, estos problemas probablemente mostrarán otros síntomas antes de que falle el convertidor. Ejemplos de esto son el humo o la luz de verificación del motor. Esto debe resolverse antes de tratar con el convertidor. Los convertidores catalíticos requieren la mezcla ideal de gases de escape a la temperatura correcta para funcionar correctamente, y cualquier alteración de esta mezcla, en forma de aditivo o fluctuación de temperatura, puede causar daños.