Parece que fue ayer que Mango Sandlandiaun proyecto de Akira Toriyama, obviamente mucho más conocido por Dragon Ball (¡es fácil encontrar similitudes entre ambas obras!), llegó al mercado, pero no, el primer capítulo del manga llegó a las tiendas en un año ya lejano de 2000.
El tiempo pasa demasiado rápido… Por eso, lamentablemente, el creador del proyecto ya no está con nosotros.
¿Pero sabes qué es siempre bueno en el mundo del arte? Es solo que éste permanece para siempre, y Sand Land es ahora una especie de tributo al legado de Akira Toriyama. Podría haber sido un homenaje un poco más convincente.
(Análisis) Sand Land: ¡Curioso adiós al maestro Akira!
Por tanto, Sand Land es un RPG basado en mucha acción, completo con “dibujos” que son realmente capaces de trasladarnos a nuestra infancia. Sin embargo, se necesitan las cosas buenas, pero también las malas. Este proyecto parece ser el tipo de juego que nuestro abuelo intentó regalarnos como sorpresa para Semana Santa, Año Nuevo o Navidad, porque simplemente vio el nombre del juego y pensó que nos encantaría. Una buena sorpresa en términos de ternura, pero decepcionante en el juego en sí.
Sand Land recuerda a los tiempos oscuros en los que todas y cada una de las películas o series tenían que tener un juego, tuviera lógica o no, fuera bueno o malo. No es que el juego en sí sea realmente malo. Pero a veces intentas hacer mucho con poco y las cosas simplemente parecen extrañas.
En otras palabras, podría estar en una sección de plataforma, con una cantidad casi infinita de objetos o enemigos a evitar. Como surgido de la nada, hay que reproducir una secuencia de persecución, o bien, hay que pulsar los botones correctos como si de una cinemática de God of War se tratara.
Hace de todo, y al mismo tiempo no hace nada, porque las cosas acaban sin tener mucha lógica.
Lo cual es una pena, porque hay momentos realmente encantadores de pura diversión en Sand Land.
Afortunadamente, los gráficos muy de estilo anime, así como un sistema de transporte de “viaje rápido” súper efectivo, logran ocultar algunos de los defectos. Después de todo, cualquier ciudad o estación, una vez visitada, se convierte automáticamente en un punto de teletransportación. Así, si has olvidado algo, o incluso necesitas ir a un área específica, basta con hacer unos pocos clics en los botones de tu mando o ratón.
Además, ¡el combate también es muy gratuito! Puedes elegir a tus enemigos y derrotarlos hasta convertirlos en pulpa, o simplemente puedes seguir adelante con la historia y hacer otra cosa. ¡Tener libertad de elección es genial!
Sin embargo, el combate no es extremadamente complejo, y es posible jugar en la dificultad más alta sin mayores dificultades, siempre que tengas 5 dedos en cada mano.
Conclusión
El juego es hermoso y encantador, pero su esencia es débil, porque la mecánica fue mal pensada o implementada de manera desordenada.
Aún así, si eres un verdadero fanático de Sand Land, obviamente pasarás buenos momentos. Si este juego no fuera una vuelta al pasado de los juegos con licencia porque sí.
6/10