Una vez más, Boeing se vio obligada a cancelar su primer vuelo con tripulación humana al espacio.
Debido a problemas con la válvula del cohete, la compañía tuvo que cancelar el lanzamiento de la cápsula Starliner apenas dos horas antes del despegue.
Un nuevo lanzamiento podría ocurrir en las próximas semanas.
El director general de United Launch Alliance, Tory Bruno, explicó que la válvula de alivio de presión de oxígeno tuvo problemas y que ese fue el motivo que llevó a posponer un nuevo intento en las próximas semanas.
El mismo responsable agregó que esta válvula pudo haber superado sus 200.000 ciclos de vida útil y que, por lo tanto, habrá que reemplazarla. Sin embargo, si esta válvula supera las pruebas del equipo técnico y no ha alcanzado su vida útil, el primer vuelo de Boeing con tripulación humana podría tener lugar el próximo viernes.
Esta no es la primera vez que Boeing se enfrenta a dificultades debido a problemas con estas válvulas. El alto funcionario recordó que problemas similares ya han existido en otros cohetes Atlas utilizados para lanzar satélites.
Ahora con una tripulación humana a bordo, Boeing refuerza las medidas de seguridad, prohibiendo incluso el reciclaje de válvulas de un equipo a otro.
En 2019, otros problemas obligaron a un nuevo aplazamiento
Pero no son sólo las válvulas las que han estado dando problemas a Boeing y las que han llevado a la compañía a posponer consecutivamente los lanzamientos al espacio.
En 2019, el primer vuelo de prueba de Starliner no logró llegar a la Estación Espacial Internacional debido a problemas relacionados con paracaídas y cintas inflamables.
Esta vez, la compañía acabó repitiendo este vuelo de prueba que, a modo de experimento, no incluía tripulación humana a bordo.
