Como puedes imaginar, el Fuga.pt prueba decenas de smartphones cada año, repartidos en los diferentes rangos de precios de este mercado, por lo que tenemos una idea casi perfecta de lo que cambia entre generaciones, o mejor dicho, sabemos cuándo realmente vale la pena cambiar de móvil en estos nuevos generaciones en las que tan poco o nada cambia.
¿Alguna idea?
Cambiar de smartphone: ¿Cuándo es el mejor momento?
¿Cuándo fue la última vez que cambiaste de celular? ¿Este año? Hace 2 años, ¿tal vez más? Bueno, cambié el viernes pasado, y debería volver a cambiar antes de que termine la semana, ya que tengo algunos plegables para probar y así dar mi opinión.
Dicho todo esto, en algunos casos tuve la oportunidad de utilizar casi todas las generaciones de dispositivos de las marcas más importantes y icónicas del mercado, como la gama Redmi Note, Xiaomi, Galaxy S, Galaxy Z, Honor Magic, Oppo. Encontrar, etc… Es un puesto curioso, y evidentemente es un trabajo que me encanta. Sin embargo, también me permite decir que a lo largo de las generaciones no hay tantos cambios.
¡Cambiar de smartphone cada año es un error!
A menos que tengas el mismo trabajo que yo, o tengas más o menos el mismo dinero que el viejo Scrooge McDuck, no tiene mucho sentido cambiar constantemente de teléfono inteligente para estar constantemente en la cima de la ola.
De hecho, si hay algo que he notado a lo largo de los años es que cuanto más un fabricante afirma haber cambiado “cosas”, menos cambios sentirás al usar el dispositivo a diario.
Evidentemente, siempre es increíble sacar un smartphone de su caja, quitarle el plástico y configurar todo y cualquier otra cosa. Pero, al cabo de 1 o 2 semanas, te darás cuenta de que es el mismo smartphone, y que lo utilizarás para hacer exactamente lo mismo que hacías con tu antiguo smartphone. Podría ser un poco más claro, un poco más brillante y, por supuesto, un poco más rápido. Pero… ¿Hará (realmente) alguna diferencia?
Es triste, pero la realidad es que hemos llegado a un punto en el que no es posible innovar en cada generación, y las grandes mejoras están en el lado del SoC o en el lado de la cámara. Ahora también tenemos novedades sobre la Inteligencia Artificial, pero hasta el momento todavía estamos en el principio y nadie sabe todavía muy bien cómo irá la cosa. Comprar un smartphone en 2024 pensando en la IA… ¡Es un error!
La gran mayoría de las nuevas generaciones, salvo raras excepciones, son extremadamente similares a lo que ya existe en el mercado. Es una pena, pero es la “nueva normalidad”.. Especialmente en un momento en el que cualquier tope de gama cuesta más de 1.000 €, e incluso hay planes de llevar el precio de los modelos Ultra y Pro Max en esta vida a 1.600 o 1.700 €.
Curiosamente, ¡ni siquiera el software sufre grandes revoluciones!
Una de las principales razones por las que un consumidor puede estar dispuesto a cambiar de teléfono inteligente hoy en día son las recientes promesas de algunos fabricantes de mantener sus dispositivos actualizados durante mucho más tiempo de lo normal hace unos años.
Si no lo recuerdas, Google prometió 7 años de actualizaciones en el momento del lanzamiento del Pixel 8, y como tal, Samsung y Xiaomi intentaron cumplir esa misma promesa, redoblando también sus esfuerzos en el desarrollo de software y lado de mantenimiento.
Sin embargo, si bien las actualizaciones son importantes para mantener seguro su teléfono inteligente, el que ahora es el dispositivo informático más importante en nuestra vida diaria. La realidad es que muy pocas veces vemos llegar al mercado actualizaciones importantes, repletas de funciones capaces de cambiar la forma en la que utilizamos los smartphones.
Desafortunadamente, hasta ahora hemos llegado a la cima de la montaña. (¡A menos, por supuesto, que la IA sea realmente un éxito absurdo!)
¡Todavía hay “superciclos”! ¿Qué es esto?
Pues como ya te habrás dado cuenta, la nueva generación de cualquier producto aparece en el mercado con un diseño y capacidades técnicas muy similares a lo que ya conocemos. Basta con mirar el iPhone 15, que es tremendamente similar al iPhone 14, que a su vez ya era similar al iPhone 13, 12, etc… Lo mismo ocurre también por el lado de Samsung, con el diseño base del Galaxy S. y las gamas Galaxy Z serán exactamente iguales durante varios años.
Pero, de vez en cuando, ¡los fabricantes cambian el diseño por completo! A esto se le llama “superciclo”. Un momento en el que además de diseños más atrevidos, también intentan implementar características un poco más atractivas para captar la atención de los consumidores.
Un buen ejemplo de ello son los rumores que apuntan a un Galaxy S25 Ultra más redondeado, con un diseño (por fin) diferente al de los Galaxy S24, S23 y S22. Sin olvidar nunca todas las “filtraciones” y rumores que rodean al iPhone 17 Slim, que debería servir como un nuevo ciclo de superactualización para iOS, al igual que el iPhone X (2017) anterior.
- Nota: Es posible que en 2025 haya un súper ciclo hacia la mejora de las especificaciones técnicas, es decir, el aumento de la memoria RAM y las capacidades de NPU. Todo debido a la implementación masiva de funcionalidades de IA.
Conclusión: ¿Cuándo deberías cambiar tu smartphone?
Ahora que la gran mayoría de smartphones cuentan con un nivel de soporte muy interesante, cada vez son más fáciles de reparar, e incluso después de 2 o 3 años siguen ofreciendo altos niveles de rendimiento. No hay muchas razones para optar por el nuevo Samsung Galaxy, Apple iPhone o Google Pixel.
Sí, tener el dispositivo más bonito y moderno del mercado puede ser “cool”, pero ¿no es mejor guardar 1500€ en el bolsillo?
De hecho, incluso existe la idea de que si los consumidores dejan de perseguir lo “mejor” y lo “último”. Es muy probable que los fabricantes empiecen a darse cuenta de que la estrategia actual ya no funciona. Como tal, tendrán un nuevo deseo de trabajar en soluciones más innovadoras a precios más atractivos.
En definitiva, sólo cambia tu móvil y sólo cuando el tuyo empiece a mostrar limitaciones en el uso del día a día. O si hay problemas que requieren reparación. ¡No cambies sólo por cambiar!