Si bien suele ser fácil localizar una fuga de aceite o refrigerante, especialmente debido a la presencia de líquido, encontrar una fuga de vacío puede ser un proceso menos sencillo. La presión de vacío producida por el movimiento de los pistones de su motor no solo se utiliza para introducir la mezcla de aire y combustible en los cilindros a través de las válvulas de admisión. Una serie de mangueras que salen del colector de admisión distribuyen este vacío a otras partes de su automóvil. Pero al fin y al cabo, ¿cómo es posible descubrir una fuga de vacío en su coche? ¡Podría ser muy importante!
¿Cómo descubrir una fuga de vacío en tu coche?
Una fuga de vacío normalmente no impedirá que el motor arranque. Sin embargo, podría ser uno de los problemas que activan la molesta luz del “motor” en el panel de instrumentos. También puede provocar otros problemas, como un ralentí elevado o un rendimiento deficiente bajo carga, como al acelerar o subir una colina.
Confía en tus ojos y oídos
Las comprobaciones más sencillas que puede realizar para encontrar una sospecha de fuga de vacío solo requieren un poco de paciencia y herramientas instaladas permanentemente en su cabeza. Inspeccione visualmente las mangueras de vacío en busca de grietas y asegúrese de que ambos extremos de todas las mangueras estén asentados firmemente. También es útil arrancar el motor y dejarlo en ralentí mientras mueves la cabeza en busca de un silbido agudo. Eso sí, tenga cuidado con las piezas móviles como las correas de accesorios y el ventilador de refrigeración. También asegúrese de mantener su cabello largo recogido y sus manos fuera de la zona de peligro.
A menos que tenga una fuga importante de vacío, el ruido puede eliminarse con los sonidos del motor y puede ser difícil de detectar solo con los oídos. Si este es el caso, también puedes intentar cortar algunas de las líneas de vacío. Esto puede ayudar a identificar un componente con fugas, como un servofreno o un avance de vacío del distribuidor.
Las fugas de vacío también pueden deberse a un colector de admisión flojo o agrietado.
Algunas pruebas avanzadas
Si no puede ver ni oír de dónde proviene la fuga de vacío, existen otras pruebas que puede realizar. Las fugas de vacío que provocan la entrada de exceso de aire al motor se pueden localizar utilizando un soplete de propano apagado, una lata de líquido de arranque, un limpiador de carburador o un limpiador de frenos. Todas estas sustancias son combustibles y, cuando ingresan al motor a través de una fuga de vacío, hacen que el motor funcione en ralentí más rápido y con mayor suavidad que cuando se aspira un exceso de aire a través de la fuga.
Para esta prueba también se puede utilizar WD-40, que tiene muchos otros usos en la reparación y mantenimiento de automóviles. Dado que todas estas sustancias son inflamables, tenga cuidado de no rociarlas en los colectores de escape calientes. O cerca de los terminales de la batería, que pueden formar arcos y generar chispas.
Sin embargo, como ocurre con cualquier tarea de reparación de automóviles, es una buena idea tener a mano un extintor químico o una manta ignífuga en caso de que ocurra un accidente. También existen formas menos primitivas de detectar fugas de vacío.