¡Después de coches y motos, también tendremos aviones eléctricos!

Evidentemente, no estamos hablando de aviones comerciales con capacidad para albergar a cientos de pasajeros. Hablamos de aviones eléctricos mucho más pequeños, con capacidad para albergar hasta 9 pasajeros, con una autonomía puramente eléctrica de 800 kilómetros.

Todavía no sabemos qué tan viable podría ser esto, especialmente si tenemos en cuenta las velocidades de carga y los costos de mantenimiento. Sin embargo, este tipo de avión aparecerá en el mercado a finales de esta década.

¡Después de coches y motos, también tendremos aviones eléctricos!

Por lo tanto, a pesar del gran interés puesto en la electrificación de automóviles y motocicletas, la realidad es que aún quedan otros avances por hacer en el ámbito de los aviones. Una de las empresas que más ha invertido y que más cerca está de tener en circulación aviones 100% eléctricos es Eviation, que ya está aceptando pedidos de su avión Alice, totalmente eléctrico y con cero emisiones.

Sin embargo, aceptar pedidos no significa que este avión despegue de inmediato. Los desafíos a la certificación significan que Alice permanecerá en el terreno hasta al menos 2029 o 2030.

Uno de los interesados ​​en sumarse al proyecto es UrbanLink Air Mobility, compañía de Florida que vuelve a incrementar su inversión en planes de electrificación de los viajes aéreos urbanos. Ya ha pedido 10 unidades y parece que pedirá 10 más después del primer envío.

¿Cuál es la velocidad y el alcance?

Como decíamos anteriormente, su alcance máximo es de aproximadamente 800 kilómetros, lo que supone aproximadamente 440 millas náuticas. Además, tiene una velocidad de crucero de “sólo” 460 kilómetros por hora, lo que por supuesto no batirá ningún récord.

Aún así, esta bien podría ser la solución para los viajes cortos, que ahora corren el riesgo de desaparecer por emisiones innecesarias cuando existan alternativas más limpias a disposición de la población.

¿Es este el futuro?

Sinceramente, creo que el futuro de la aviación, y también de los grandes barcos, estará en el hidrógeno y no en las baterías. Aún así, es fantástico ver que incluso en la aviación existe un fuerte compromiso con la electrificación.