Después de los «supercoches eléctricos», ahora se habla de los «hipercoches eléctricos», término utilizado para designar los vehículos realmente rápidos, aquellos que pueden alcanzar los 100 km/h en menos de dos segundos.
El concepto no es nuevo y ya existen varios modelos físicos disponibles, listos para que cualquiera con unos cuantos millones pueda pagar por ellos; pero la lucha ahora parece estar en los milisegundos posibles para ‘robar’ a la velocidad de salida y, sobre todo, en la ‘inteligencia’ asociada al propio vehículo.
En este capítulo, ahora tenemos un nuevo nombre: Robo X, desarrollado por la empresa china JiYue en colaboración con Baidu, una de las pocas empresas con licencia oficial para operar robotaxis en China.
Alta velocidad en modo (casi) autónomo
El fabricante del Robo.
El nuevo modelo está lejos de ser un robotaxi totalmente autónomo, pero sus responsables apuntan a que la IA contribuye, en gran medida, a la gestión de sus componentes técnicos.
Robo X utilizará la plataforma de conducción autónoma Apollo de Baidu, que proporciona la plataforma del vehículo, hardware, software y servicios de nube de datos, capaz de soportar la conducción autónoma de nivel 4.
Según el sitio web SupercarBlondie, lo más destacado del JiYue Robo
A pesar de ser un coche que apunta principalmente a disputar el campeonato de alta velocidad, la marca promete una autonomía de más de 640 km, valores significativos para un modelo de altas prestaciones.
En cuanto a la velocidad máxima, JiYue no da indicaciones sobre el pico posible de alcanzar con su ‘hypercar’, dejando así al Aspark OWL SP600 el récord de 438,7 km/h.
El robot JiYue