No es ningún secreto que el combustible es caro y que su precio rara vez baja durante mucho tiempo. Para contrarrestar el daño causado por los combustibles fósiles, los científicos están trabajando arduamente para hacerlos menos esenciales para la vida cotidiana. Actualmente, incluso se están explorando algunas fuentes de energía renovables interesantes para ayudar en diferentes situaciones. Pero no son los únicos. Como el diésel es igualmente caro, algunas personas creen que se puede sustituir por aceite vegetal. ¿Pero es realmente así?
¿Es cierto que se puede sustituir el diésel por aceite vegetal?
En la práctica, no. El aceite vegetal listo para usar no es una buena alternativa al diésel, ni siquiera para los camiones diésel más fiables que existen. De hecho, el aceite vegetal puede provocar graves daños al motor. La acumulación de carbón ocurre rápidamente, lo que resulta en una reducción de la eficiencia del motor y la necesidad de reparaciones costosas. Incluso cuando se mezcla con diésel, este problema sigue presente, lo que hace que el aceite vegetal normal sea un riesgo para los motores diésel en este momento.
Sin embargo, el hecho de que el aceite vegetal no esté destinado a un uso prolongado en motores diésel no significa que no pueda utilizarse de otras formas. El aceite vegetal no es una alternativa al diésel, pero el biocombustible sí puede serlo.
Esta idea no surgió de la nada…
Es muy probable que esté relacionado con el concepto de biocombustible y su evolución en los últimos años. Para aquellos que aún no lo saben, el biocombustible es exactamente lo que parece: una fuente de combustible renovable y biodegradable derivada de la biomasa, como las plantas. La esperanza es que algún día pueda ser un sustituto generalizado de los combustibles fósiles, como la energía eólica y solar. Actualmente, el aceite vegetal juega un papel importante en la creación de algunos biocombustibles.
Se pueden utilizar aceites vegetales u otras grasas para crear biocombustibles seguros para motores diésel mediante el proceso de transesterificación. Es una reacción con metanol en la que se utiliza sosa cáustica como catalizador. Como resultado de este proceso, la viscosidad y el punto de ebullición, dos de los principales factores responsables de la problemática acumulación de carbono antes mencionada, del aceite vegetal se reducen a un nivel similar al del diésel normal. Desafortunadamente, el biocombustible está lejos de alcanzar un uso generalizado. Esto a pesar de los avances para garantizar que se vuelva más común en las próximas décadas.
Por supuesto, existen algunas diferencias entre el biocombustible y el diésel. Sin embargo, estas diferencias no se acercan a las que existen entre el aceite vegetal y el diésel. Es mejor evitar llenar los motores diésel con aceite vegetal normal, ya que, a diferencia del biocombustible, esto causará más daños que beneficios.