¡Estas son señales de que la dirección asistida tiene problemas!

Si alguna vez ha conducido un vehículo antiguo sin dirección asistida, probablemente comprenda la importancia de este sistema en los automóviles modernos. Estos componentes nos permiten girar el volante con el mínimo esfuerzo, gracias a un complejo sistema hidráulico y una serie de piezas interconectadas. Aunque la mayoría de los vehículos más nuevos hoy en día utilizan sistemas de dirección asistida eléctrica, los sistemas hidráulicos siguen siendo increíblemente comunes. Los sistemas de dirección asistida hidráulica requieren un mantenimiento regular. Para que no te pille por sorpresa te contamos las señales de que la dirección asistida de tu coche está teniendo problemas.

¡Estas son señales de que la dirección asistida tiene problemas!

El líquido de la dirección asistida está sucio.

La mayoría del líquido de dirección asistida hidráulica debe ser de un color rojo intenso. Sin embargo, con el tiempo, el fluido puede degradarse y acumular contaminantes. Si comienza a verse turbio, burbujeante, grumoso o incluso negro, es señal de que necesitas reemplazar el líquido lo antes posible.

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Estos cambios de apariencia ocurren por varias razones. La razón más común por la que el líquido de la dirección asistida cambia de color es, simplemente, la edad. Con el tiempo, el fluido se degrada y se descompone, absorbiendo suciedad, polvo y otros contaminantes que llegan al sistema. El líquido de la dirección asistida que se ve marrón o turbio en sí mismo no suele ser motivo de gran preocupación, pero sí significa que es necesario reemplazar el líquido lo antes posible.

Escuchas sonidos extraños cuando giras el volante.

Otra de las señales más comunes de que algo anda mal con el sistema de dirección asistida de su automóvil es un volante ruidoso. En condiciones normales, el volante debería girar de forma suave y silenciosa. Sin embargo, si el nivel de líquido de la dirección asistida hidráulica está bajo o contaminado, o si hay problemas más graves con el sistema, puede notar que el volante emite un chirrido o gemido agudo cuando lo gira. Cuando es causado por problemas con la dirección asistida, este problema generalmente se debe a que la bomba de la dirección asistida no funciona correctamente. Sin la cantidad adecuada de líquido limpio, la bomba no puede funcionar con tanta eficiencia y tampoco recibe la cantidad correcta de lubricación.

El volante es difícil de girar.

El sistema de dirección asistida hidráulica de su automóvil funciona utilizando líquido presurizado para ayudarlo a girar el volante. Muchas piezas contribuyen a esta función, incluida una bomba, una válvula rotativa, una cremallera y un engranaje, y el propio fluido hidráulico. Si alguna de estas piezas funciona mal o se daña, el sistema no podrá funcionar correctamente y, en algunos casos, puede dejar de funcionar por completo. A medida que el sistema de dirección asistida pierde su capacidad de presurizar el líquido y ayudarlo a girar el volante, le resultará cada vez más difícil conducir su automóvil.

Tiene fugas de liquido

Estás sacando el coche cuando ves una gran mancha húmeda en el suelo donde estaba aparcado el vehículo. A nadie le gusta ver que su coche pierde líquidos. Puede dar miedo y no siempre está claro qué tipo de líquido se está escapando o exactamente de dónde viene en el vehículo. Si bien todos odiamos ver nuestros autos goteando líquido, es vital que no ignore las fugas cuando aparecen. Inspeccionar aspectos como el color, la consistencia y el olor puede ayudarnos a identificar el tipo de fluido y su origen. Al hacer esto, evitará un costoso viaje al taller debido a la condensación que puede ser inofensiva.

Las fugas de líquido de dirección asistida son una de las fugas automotrices más difíciles de identificar. Esto se debe en gran medida a que el líquido de la dirección asistida hidráulica es muy similar al líquido de la transmisión; en algunos casos, estos líquidos son exactamente iguales. Dicho esto, existen algunas formas de ayudarle a distinguir entre los dos. Tanto el líquido de la dirección asistida como el de la transmisión suelen ser de color rojo brillante y tienen olores y consistencias similares. Sin embargo, las fugas de líquido de la dirección asistida tienden a dejar charcos en la parte delantera de su vehículo. Una fuga en la rejilla puede dejar gotas de líquido más atrás, pero aun así, los charcos deben corresponder al área entre las llantas delanteras de su automóvil.

Por otro lado, las fugas de líquido de transmisión generalmente dejan charcos hacia el centro de su vehículo. Las fugas de líquido de la dirección asistida pueden dejar manchas aceitosas en el compartimiento del motor, mientras que las fugas de la transmisión tienden a dejar el chasis sucio.