Cuando se trata de limpiar el microondas, muchos de nosotros posponemos las cosas hasta que se acumula el desorden, lo que lleva a una sesión de limpieza que no es nada rápida. De hecho, puede suponer mucho trabajo. Aún así, es fundamental porque el microondas puede acumular bacterias y otras cosas que no son precisamente saludables. Las manchas de grasa, las salpicaduras de comida y la suciedad pegajosa parecen acumularse rápidamente. Sin embargo, existe una manera fácil y eficaz de dejar tu microondas impecable sin tener que esforzarte mucho. De hecho, después de probarlo, ¡este increíble truco deja el interior de tu microondas como nuevo!
Lo creas o no, las pastillas para lavavajillas, normalmente reservadas para limpiar los platos, pueden hacer maravillas en tu microondas.
Según un experto, estas tabletas contienen potentes agentes limpiadores que pueden combatir la grasa, la suciedad y las salpicaduras de comida rebeldes, dejando el interior del microondas limpio y brillante con un mínimo esfuerzo.
Sus poderosos ingredientes de limpieza también pueden ayudar a eliminar la suciedad del microondas y es tan simple como usar una tableta.
Dicho esto, la poderosa combinación de vapor y agentes de limpieza trabajan juntos para eliminar la suciedad sin esfuerzo.
Además, los agentes pulidores de la tableta dejan un acabado brillante que hará que tu microondas luzca como nuevo después de una simple limpieza.
Cuando se disuelve en agua, el vapor producido funciona como magia para aflojar la grasa y las salpicaduras acumuladas, dejando un interior pulido.
Usar solo una tableta para este truco es económico y una forma inteligente de limpiar profundamente tu microondas sin tener que gastar mucho dinero.
Cómo limpiar el interior del microondas
Toma una taza apta para microondas y agrega agua caliente. Agrega una sola pastilla para lavavajillas y revuelve hasta que se disuelva por completo, creando una solución limpiadora con poder para combatir la grasa.
Coloca el vaso con la pastilla disuelta en el microondas (recuerda sacar primero el plato del microondas, ya que se puede limpiar por separado en el fregadero).
Pon el microondas a potencia media y calienta la solución durante unos cinco minutos. El vapor comenzará a disolver la suciedad de las paredes y el techo de su microondas.
Cuando suene el cronómetro, resista la tentación de abrir inmediatamente el microondas. Deja reposar el vapor unos minutos más. Esto ayuda a aflojar aún más la comida pegada y facilita aún más el siguiente paso.
Una vez que el vapor haya hecho su trabajo, abre con cuidado el microondas y retira la taza.
Coge un paño húmedo o una esponja y limpia el interior. El resultado es un microondas limpio y reluciente, casi sin esfuerzo.