Como estamos cansados de decir, el mundo de las tablets volvió a perder mucha fuerza cuando la pandemia empezó a perder importancia. Lo que, por supuesto, significó que los consumidores empezaron a volver a su vida normal.
Esta inevitabilidad hizo que los problemas que tenían las tabletas, especialmente en el lado de Android, volvieran a ser evidentes y, por lo tanto, ante las malas ventas, los fabricantes volvieran a invertir menos en el formato.
Afortunadamente, Samsung sigue centrándose en las tablets de gama media y alta. Pero aún así, a pesar de ser el referente del ecosistema… Solo tenemos nuevos lanzamientos cada 2 años, y las diferencias entre cada generación son cada vez menores.
Galaxy Tab S10 es en realidad una Tab S9. ¡Es normal!
Por tanto, además de centrarse en los chips MediaTek en algunas de las versiones de sus nuevas tablets Tab S10, todo apunta a que el diseño será exactamente igual a lo que tuvimos la oportunidad de ver hace unos años en la gama Tab S9.
De hecho, la única diferencia esperada está en el SoC, con los modelos base llegando al mercado con chips Exynos 2400 o MediaTek Dimensity 9300+, mientras que la Tab S10 Ultra llega a los estantes con el más potente y deseado Snapdragon 8 Gen3.
¡Es normal!
Por supuesto podemos bromear diciendo que es la misma tableta, posiblemente más cara porque algunos de los componentes se han encarecido. Pero la realidad es que las tablets Android no se venden y mucho menos las de gama alta.
Ya es muy positivo ver a Samsung seguir invirtiendo en el formato, en lugar de optar por el camino que han seguido muchos otros fabricantes, como fue el caso de ASUS, renunciando casi por completo al formato.
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