¡Los caníbales están atacando coches pero tú puedes protegerte!

Más que nunca y en este verano realmente tienes que protegerte de los caníbales que atacan a los coches. Esto es algo que pasa un poco a lo largo del año. Sin embargo, en estos momentos se intensifica la demanda de vehículos para repuestos. Por ello, es necesario tomar algunas precauciones de seguridad. Antes que nada, debes saber que casi todos los vehículos en circulación pueden sufrir este fenómeno. La cuestión de si existen vehículos más o menos preferidos es una especie de mito. Nadie está realmente a salvo.

¡Los caníbales están atacando coches pero tú puedes protegerte!

Al igual que el robo de automóviles, el canibalismo automovilístico es otra preocupación importante para los propietarios de automóviles. Dado que las piezas robadas son muy difíciles de recuperar y tienen comparativamente poco valor, es muy poco probable que las recupere.

Por lo tanto, tomar precauciones contra el robo y asegurarse de tener un seguro son las mejores formas de proteger su automóvil del canibalismo.

De entrada, una de las mejores formas es aparcar en garajes o parkings vigilados.

Asimismo, conviene aparcar siempre que sea posible en una zona segura, incluso por periodos cortos de tiempo.

De hecho, los mejores lugares para dejar un coche desatendido son los garajes y aparcamientos que estén cerrados, que tengan CCTV u otras medidas de seguridad instaladas.

Sin embargo, si no tienes acceso a ninguno de estos lugares, es importante estacionar en una zona bien iluminada y donde haya mucha gente, lo que dificulta que los ladrones puedan tomar piezas sin ser notados.

Hay otra buena idea que puedes poner en práctica. Se trata de identificar las piezas que podrían desaparecer con la matriculación del vehículo.

Aunque es poco probable recuperar piezas robadas, si un ladrón nota alguna marca, disminuye la probabilidad de robar o vender esos componentes.

Por último, otro buen elemento disuasorio es equipar el vehículo con una cámara a bordo o instalar una cámara de seguridad en el lugar donde aparcas habitualmente, que comenzará a grabar si detecta movimiento cerca.

Pero ¿a qué se debe este canibalismo automovilístico?

Esto sucede porque las piezas robadas suelen ser aquellas que normalmente resultan dañadas en un accidente, como parachoques, aletas delanteras y faros.

Sin embargo, a pesar de esto, algunos ladrones apuntan a piezas más caras y rentables, incluidos los convertidores catalíticos y los airbags, cuya sustitución puede resultar costosa o dejar el vehículo fuera de condiciones para circular.

En definitiva y en conclusión, ¡mucho cuidado!