No faltan las redes sociales en Internet, ni las plataformas basadas en algún componente social, esto no es nada nuevo para nadie. Pero, para seguir vivas, estas plataformas deben poder retener a sus usuarios actuales y, lo que es más importante, intentar atraer otros nuevos.
De hecho, la atención suele centrarse en los más jóvenes, porque de hecho, son ellos quienes dominan las tendencias del mercado.
¿Adónde van? Bueno, una cosa es segura: no es para Facebook o Twitter (X).
Los jóvenes siguen diciendo adiós a Facebook… ¡y a Twitter (X)!
Hablamos, por tanto, de un cuestionario norteamericano que logró recoger las opiniones de casi 1400 adolescentes.
Curiosamente, dentro de esta muestra, alrededor del 96% de los encuestados afirmaron que utilizan Internet constantemente a diario, y casi todos poseen un teléfono inteligente o una computadora portátil, a menudo ambos.
Sin embargo, como decíamos más arriba, la gente está cada vez más apegada a sus smartphones y ordenadores y, evidentemente, las tendencias entre los jóvenes muestran un poco de nuestro futuro. Nuestro futuro y el futuro de las empresas que gobiernan el mundo de Internet.
Dicho todo esto, el Instagram parece estar creciendo, así como la WhatsApp. Todo lo demás parece estar perdiendo fuerza. Como es el caso de incógnita (17%), Facebook (32%) y Snapchat (55%).
La caída de Facebook es más o menos esperada, porque la red social alcanzó su punto máximo hace unos años, se convirtió en algo muy normal, y como tal, los más jóvenes empezaron a tener que lidiar con sus padres, tíos, padrinos, etc… Lo cual tomó quita cierta libertad de movimiento en la plataforma. Pero… ¿En X? Es un poco más extraño ahora.
Curiosamente, el tiktok También muestra un ligero descenso, pero sigue siendo una de las mayores plataformas de contenidos multimedia del planeta, con un 64%.
El gran líder es YouTube, con un 90%.
Sin embargo, además del uso de apps, hay que tener en cuenta que la gran mayoría de los jóvenes están conectados a Internet todo el día. Ya sea para hablar con amigos, o simplemente para navegar por las redes. Tenemos que empezar a cuestionarnos si esto es realmente “algo bueno”.