Ser propietario de un automóvil puede resultar costoso y ni siquiera estamos hablando de visitas al mecánico. Para que el coche funcione es necesario llenar el depósito de combustible. Desafortunadamente, no hay forma de evitarlo, pero hay cosas que puedes hacer para reducir costos y ahorrar unos cuantos dólares en gasolina. Es muy sencillo: ¡solo necesitas cambiar algunos hábitos de conducción para consumir mucho menos combustible!
¡Solo necesitas cambiar estos hábitos para usar menos combustible!
Hay ciertos hábitos de conducción que te harán gastar más dinero en gasolina. Estas son cosas que podrías estar haciendo durante años sin darte cuenta de cuánto te están costando.
Conducción agresiva
Cuando conduce constantemente por encima del límite de velocidad, se excede, cambia de carril abruptamente, acelera demasiado rápido o frena demasiado fuerte, está conduciendo de manera agresiva. Si bien este comportamiento es innegablemente peligroso, también es una forma garantizada de desperdiciar gasolina.
La conducción agresiva consume más combustible del tanque debido a la presión que ejerce sobre el motor. Por ejemplo, cuando pisas el pedal del acelerador o superas el límite de velocidad, el motor se ve obligado a trabajar más, consumiendo más combustible del necesario. La conducción agresiva puede aumentar el consumo de combustible en aproximadamente un 33% en autopista. Además, cuando frenas con fuerza, estás desperdiciando combustible al interrumpir el impulso del coche, lo que requiere más energía (y más combustible) para recuperar velocidad.
Básicamente, una conducción suave y constante es lo mejor para la economía de combustible de su automóvil. Cuando abandone sus hábitos de conducción agresivos y comience a utilizar el control de crucero en la carretera, comenzará a notar cuánto puede ahorrar en costos de combustible a largo plazo.
Caminando en cámara lenta
El ralentí es algo que no siempre se puede evitar al conducir. Sucede cuando estás atrapado en el tráfico, haciendo fila en un autoservicio o esperando en un estacionamiento para recoger a un amigo.
Sin embargo, cuando dejas el motor funcionando continuamente durante largos periodos sin moverte, estás desperdiciando combustible.
Ahora bien, si el ralentí excesivo desperdicia tanto combustible, ¿qué puede hacer una persona al respecto? La respuesta es sencilla: apaga el motor durante el tiempo de espera. Por supuesto, mucha gente piensa que arrancar de nuevo el coche gasta más combustible que dejarlo encendido, pero eso ya no es cierto. Los coches modernos están diseñados para soportar arranques frecuentes sin ningún impacto significativo en el motor.
De hecho, la mayoría de los fabricantes de automóviles ahora diseñan automóviles con tecnología de parada/arranque automático que apaga automáticamente el motor cuando el automóvil se detiene y lo reinicia inmediatamente cuando está listo para funcionar. Entonces, tan pronto como quitas el pie del pedal del freno y lo colocas en el pedal del acelerador, el motor arranca de nuevo y está listo para funcionar.
De esta forma, al arrancar el motor en lugar de dejarlo al ralentí, también estarás reduciendo las emisiones y contribuyendo significativamente a la protección del medio ambiente.
Planificación de rutas ineficiente
Al planificar cuidadosamente sus rutas de conducción, puede reducir el tiempo que pasa atrapado en el tráfico, que, como ya hemos mencionado, es una de las formas en que desperdicia combustible. Cuando planifica intencionalmente sus rutas utilizando aplicaciones como Google Maps para evitar áreas congestionadas, puede reducir el tiempo que su motor pasa en ralentí y, en última instancia, conserva combustible en el tanque. Además, intenta combinar varios viajes pequeños en uno largo. Y si es posible, trate de viajar durante las horas de menor actividad para evitar el tráfico cuando hay más denso y mantener un viaje tranquilo, estable y con bajo consumo de combustible.
Sobrecargar el auto
¿Sabes cuál es el límite de peso de tu coche? No es algo en lo que muchos de nosotros pensemos a menudo. Sin embargo, es una información que debes conocer y que puedes encontrar en el manual del propietario. Cuando agrega demasiado peso a su automóvil, el motor tiene que trabajar mucho más para moverse, acelerar y mantener la velocidad. Todo ese esfuerzo adicional significa que el motor quemará más combustible para generar toda la potencia que necesita.
La sobrecarga también ejerce presión adicional sobre otros componentes del automóvil, como el sistema de suspensión, los frenos y los neumáticos. Los neumáticos, en particular, se desgastan más rápidamente cuando llevan constantemente un exceso de peso.
Entonces, adoptando estos hábitos consumirás menos combustible.