No es nada nuevo para nadie decir que la tecnología que da vida al estándar USB es una de las más importantes de nuestras vidas. Pero, como también hemos dicho en el pasado, no todos los cables y puertos USB son iguales.
El USB ha ido evolucionando de forma casi absurda, y por ello hay que fijarse bien en la versión 4.
¡USB4 es importante para su futuro en tecnología!
Por tanto, cualquiera que haya utilizado un PC de sobremesa, portátil, tablet, smartphone, etc. en la última década, ya ha tenido que utilizar al menos un cable USB.
Estamos hablando de algo que solucionó un grave problema en el mundo de la tecnología personal. Más concretamente, el hecho de que resulta complicado conectar varios dispositivos a una sola máquina.
Así, cuando el USB llegó al mercado en 1996, trajo un estándar universal para todo, o al menos para casi todo. Pero, como la tecnología no se detiene, el estándar tuvo que evolucionar, y es exactamente por eso que todavía tenemos el USB-A tradicional y el USB-C más moderno.
De hecho, veamos un poco la historia de la tecnología a lo largo de los años.
- USB 1.0 (1996): Todo empezó con la icónica conectividad Tipo-A, que todavía podemos encontrar en el mercado hoy en día. Sin embargo, en ese momento era capaz de alcanzar una velocidad de transferencia de sólo 12 Mbps. Sólo cuando se produjo la actualización USB 1.1 en 1998, el estándar comenzó a adoptarse más ampliamente.
- USB 2.0 (2000): Fue en 2020 que el USB subió a otros niveles de rendimiento y exigencia. La velocidad aumentó a 480 Mbps y, de hecho, este estándar todavía aparece en varios dispositivos modernos, como el iPhone 16 (el USB 2.0 también trajo los formatos mini y micro).
- USB 3.0 (2008): Aquí es donde las cosas empezaron a ponerse más serias, con la velocidad aumentando a 5 Gbps. Pero la clave estuvo en 2014 cuando se lanzó la actualización USB 3.2, que a su vez también traía USB-C, así como un aumento de velocidad hasta los 10 Gbps.
- USB4 (2019): Basado en la tecnología Thunderbolt 3 de Intel, USB4 es compatible con todo o casi todo. Alcanza los 40 Gbps, puede cargar dispositivos electrónicos hasta 240 W y también puede pasar datos de imagen y sonido a través del modo DP-Alt.
Entonces, desde 1996, la tecnología que da vida al estándar USB ha ido evolucionando increíblemente, y por esa razón, es hora de empezar a prestar más atención a la versión del estándar USB en tus dispositivos electrónicos.
En definitiva, tienes que asegurarte de tener USB4, porque de lo contrario, podrías perder mucho en cuanto a funcionalidades, tanto en el presente como en el futuro.