Puede parecer extraño, pero una nueva investigación en los Estados Unidos sugiere que las partículas microscópicas de oro pueden usarse para tratar enfermedades oculares, como la degeneración macular relacionada con la edad (DMRI). De hecho, las inyecciones de oro son el futuro para recuperar su visión.
¡Las inyecciones doradas son el futuro para recuperar su visión!
Esta condición afecta a millones de personas en todo el mundo y se vuelve más común con el envejecimiento. El problema está en la mácula, una zona retiniana rica en células fotosensibles, cuya degradación conduce a una pérdida progresiva de la visión central. Hoy, los tratamientos existentes solo pueden ralentizar la progresión de la enfermedad sin revelar el daño ya causado.
Pero un nuevo estudio de ratones, realizado por investigadores de la Universidad de Brown, allana el camino hacia un tipo innovador de prótesis retiniana que podría restaurar la visión sin la necesidad de cirugía invasiva o modificación genética.
Cómo funciona el tratamiento con nanopartículas de oro
La técnica utiliza nanopartículas de oro extremadamente delgadas, miles de veces más delgadas que un cabello, combinando anticuerpos que las dirigen a células oculares específicas. Luego se inyectan estas partículas en el gel que llena el espacio entre la lente y la retina.
Con las nanopartículas ya posicionadas, la luz infrarroja se aplica a través de un pequeño láser, que se puede incorporar en gafas especiales en el futuro. La luz activa las nanopartículas, que a su vez estimulan las células visuales, funcionando como si fueran fotorers naturales.
En las pruebas realizadas en ratones modificados genéticamente con enfermedades retinianas, el método mostró resultados prometedores y restaurando parcialmente la visión.
Resultados prometedores y camino a seguir
El tratamiento comparte algunas similitudes con los enfoques existentes para enfermedades como la retinitis pigmentaria, pero tiene la ventaja de ser menos invasivo y poder cubrir un área más amplia del campo visual.
Aunque los resultados se limitan, por ahora, a los modelos animales, los investigadores creen que esta tecnología se puede adaptar con éxito a los humanos, aunque esto todavía requiere tiempo, pruebas estrictas y mejoras técnicas.
Un nuevo horizonte en el tratamiento de enfermedades oculares
Este estudio se une a un número creciente de investigaciones que utilizan tecnologías avanzadas para tratar enfermedades de la retina. Otros enfoques de desarrollo incluyen reprogramación de células retinianas o el uso de prótesis fototérmicas portátiles.
Aunque todavía estamos en los primeros pasos, este es otro ejemplo de cómo la ciencia y la ingeniería pueden ayudar a transformar el futuro de la medicina ocular.