Como es normal, si no innovas y encima subes precios, perderás parte de la importancia que tenías en el mercado. Especialmente cuando la competencia comienza a destacar con productos potencialmente superiores en varias áreas importantes de lo que es un teléfono inteligente.
Eso es lo que está pasando con Samsung. La todavía actual “reina” de los productos plegables ya se ha dado cuenta de que los consumidores ya no son tan apasionados como antes y, por tanto, los objetivos tienen que ser diferentes para las próximas generaciones.
Samsung producirá menos plegables. ¿Principio de fin?
Por lo tanto, a pesar de los buenos teléfonos inteligentes, refinados, hermosos y con mucha IA en la mezcla, la realidad es que el Galaxy Z Fold6 y Flip6 no vendieron nada especial. Por tanto, incluso con planes sobre la mesa para mejorarlos en 2025, la realidad es que Samsung ya está recortando la producción.
Desafortunadamente, vender porque es Samsung no es tan fácil como solía ser. Por lo tanto, mientras otros fabricantes impresionan, como Honor con su Magic V3, Samsung ya se ha dado cuenta de que le falta tren. Pero esto es culpa suya.
El Galaxy Z más reciente llegó al mercado en un 99% igual que los modelos del año pasado, centrándose únicamente en la puesta a punto y el refinamiento. ¡No es suficiente! Sobre todo porque el precio ha aumentado 100 euros respecto a la generación anterior. ¿Para qué fueron esos 100€? Nadie lo sabe… Pero terminaron alienando aún más a los consumidores.
¿De cuánto será el recorte?
En la generación Fold6 y Flip6, Samsung decidió producir aproximadamente 8,2 millones de unidades de teléfonos inteligentes plegables. En 2025, es muy probable que se alcancen los 5 millones de unidades (2 millones para el Fold7 y 3 millones para el Flip7). Esto supone un recorte de más o menos el 40%.
Un recorte realmente significativo.
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