Si ayer hablábamos de una Air Fryer de 2 litros que cuesta 24 Euros en LIDL, hoy toca destacar una súper Air Fryer de Pingo Doce que tiene una capacidad de 5 litros y cuesta la mitad de precio. Realmente es una gran oportunidad que no debe perderse. Así que puedes comprar esta freidora de aire muy avanzada por sólo 49 euros, cuando el precio normal sería de 99 euros. Esta promoción es válida del 14 al 20 de enero.
Freidora de aire Pingo Doce disponible del 14 al 20 de enero
Uno de los primeros aspectos a destacar de esta freidora de aire caliente es el hecho de que cuenta con una ventana que permite monitorear el proceso de cocción del equipo sin tener que abrir el cajón y detener el proceso. Esto garantiza una cocción aún más rápida.
Gracias al rango de temperatura de 80°C a 200°C y a la posibilidad de configurar el tiempo de 1 a 60 minutos, podrás preparar fácilmente todos los platos.
Mientras tanto, para facilitar el proceso, puedes utilizar el panel táctil que da acceso a 8 programas automáticos. Selecciona el tipo de comida que quieres cocinar, presiona un botón y ¡listo!
Gracias a que tiene un cesto de 5 litros, podrás preparar la cena para toda la familia o una comida con varios ingredientes.
La freidora de aire Pingo Doce de 5 litros es ideal para una familia de 3 o 4 personas.
¿Vale la pena comprar una freidora de aire?
Como ocurre con cualquier equipo, siempre hay aspectos positivos y negativos. El funcionamiento de la Air Fryer es muy similar al de un horno convencional. Dicho esto, tenemos un elemento calefactor y luego un ventilador para mover rápidamente el aire caliente alrededor de la comida.
En cuanto al consumo, una freidora suele consumir entre 1,4 kWh y 1,8 kWh de electricidad cada hora que está encendida. Teniendo en cuenta que la mayoría de las recetas para una freidora tienen un tiempo de cocción de 15 a 20 minutos, esto significa que normalmente usaría entre 0,35 kWh y 0,6 kWh de electricidad. Las freidoras son rápidas y potentes, por lo que cocinan los alimentos rápidamente.
Las ventajas
Los alimentos se cocinan más rápido debido a que son relativamente pequeños. Dicho esto, el aire caliente puede moverse más rápido alrededor de los alimentos.
Sin añadir grasas, los alimentos pueden quedar crujientes como los que se fríen en freidoras convencionales.
Otra ventaja es que las freidoras no ocupan mucho espacio en tu cocina.
Además, los alimentos se cocinan de forma más uniforme, porque el aire caliente llega fácilmente a toda la freidora. Dicho esto, no habrá zonas más frías como ocurre a veces con otros equipos.
Además, en la mayoría de los casos las piezas de una freidora se pueden lavar en el lavavajillas, lo que facilita la limpieza.